La música amansa a las fieras. Por eso existe el hilo musical en el supermercado, para que las cajeras no se enfaden viendo lo que cobran ellas y lo que gana su jefe.
Lo que no saben las cajeras es que los músicos también son unos muertos de hambre. Especialmente los de la música clásica. Tanto piano no puede ser bueno. Que cojones! Sexo, drogas y rock and roll. Ya se lo decían a Beethoven, pero el muy puñetero se hacía el sordo.
Yo soy de la época en donde los músicos eran feos y no sabían tocar. Por eso yo tocaba la guitarra, era bastante famoso… mi madre me reconocía por la calle. Tocábamos en los pueblos, adaptábamos temas de los Beatles “yellow submarine”, el submarino de hielo.
Para llegar a ser un músico reconocido hay que sudar mucho. Que se lo digan a los Beatles que todas las fans caían desmayadas (se señala el sobaco)
Si tienes un disco es más fácil encontrar actuaciones, lo difícil es cobrarlas. Ser músico es como jugar al Monopoli, siempre vuelves a la casilla de salida sin cobrar las veinte mil.
En mitad de nuestras actuaciones, los chicos nos pedían “la lenta” para bailar con alguna chica. Antes tenían que pedir permiso a su madre… era la que entendía de música.
Ahora las cosas han cambiado, las madres se quedan en casa mirando la tele y si quieres conocer a una chica debes pedirle al discjockey que baje la música. Porque ahora que se puede decir de todo, nadie dice nada… ni los que las hacen, ni los que las escuchan.
El mundo de la música no le gustaba a los padres de Chema. “De la música no comerás”, le decían. Dejó la banda y estudió fuerte hasta llegar a ser un banquero muy honrado. Chema siempre recuerda ese gran consejo de sus padres. Ahora tiene un plato en la mesa, un techo y frontón por veinte años, tres meses y un día.
Un músico inteligente acaba dejando la guitarra para hacer de manager. El mejor arte es el de las finanzas. El manager es el que verdaderamente se pone al público en el bolsillo (saca unos billetes del bolsillo)
De todas formas, haciendo de manager se me iban muriendo los artistas por el camino. “Mientras hayan tumbas, habrán artistas”, pensaba yo. Pero al final me quede solo. El último fue un pobre cantautor que murió de hambre. Él se quejaba todo el día, pero como era un cantautor protesta… !!! Creía que estaba ensayando un nuevo tema!!!
Sin artistas me busqué la vida como actor. Una vez me contrataron como actor porno. El guión exige mucha concentración… y un alto nivel de compenetración... Detrás de cada actriz hay un gran actor.
Mis padres fueron al estreno y nunca más me dirigieron la palabra. Son tan inocentes! Creen que lo que sale en la pantalla sucede en la realidad. Los actores no mueren en el cine, cuando hay una escena de riesgo con explosiones y metralla, no es el actor el que muere sino el especialista.
Mis padres me recriminaron que no tenía una buena educación sexual… ¿educación sexual? ¿Es que en el sexo hay educación? ¿Dejar pasar primero a las mujeres y los viejos? ¿No empezar a comer hasta que todos estén servidos?
De echo las tribus Burundis sí que se lo montan bien. Cuando un niño tiene que aprender, lo dejan en medio del bosque. Venga! Edúcate solo! Si vuelve con vida es aceptado en la tribu; si vuelve muerto, lo rechazan.
La vida es complicada, por eso no quiero tener hijos. Antes prefiero tener un madelman… es más practico. Lo puedes llevar donde quieras, no llora, es articulado y no hace falta cambiarle los complementos cada día.
Duró poco el sueño de ser actor, los directores decían que no daba la talla, “a usted le falta imagen”, tal fue su insistencia que al final me lo creí. No dormía por las noches, bebía sangre y odiaba el ajo. Vosotros si que no tenéis imagen!!! Chupa sangres.
También los actores son unos muertos de hambre. Fíjate tú mismo, entra en cualquier estreno y verás que todo el público está comiendo desesperadamente.
Al final de la peli, aprovechando que iba a ver un melodrama y he entrado a una de desastres sísmicos, la obligada pregunta tiene una respuesta en consonancia. ¿Te ha gustado la película? ….Sí!!!, pero con un poco de ketchup hubiera estado perfecta.
En los cines cualquier producto que al tocarlo o hincarle el diente desprenda un ruido infernal pasa el control de acceso. Si el producto en su estado natural no hace cric, krap, ñic, pof o cranch, como puede ser los ositos de gominola, ya se habrán encargado de cubrirlos con un papel celofán multi sonidos.
Añoro ese silencio del pasado. ¿Recordáis? Antes ibas al cine y veías dos películas a precio de una. Ahora tienes que ir a un centro comercial a escoger entre veinte pelis que te dan asco.
La única ventaja de ser artista es que no tienes que justificar que eres imbécil. Tienes una amnistía total, aunque eso no te libra de morirte de hambre. Por eso cada día hay más famosos y menos artistas. Ser artista es un oficio con fecha de caducidad. Siempre llega el día en que el público te insinúa que te retires y el cobrador del frac te aconseja que cambies de oficio. Es como si al butanero le dijeran que ya no sube la bombona con la misma gracia de antes.
Esta claro que ahora con un micro y unas buenas tetas puedes vender muchos discos. Pero con el tiempo estas cosas acaban cayendo por su propio peso. (Gesticula poniéndose las manos en los pechos)
1 comentario:
M'ha agradat molt. Molt.
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